El Consejo Directivo del CCT CONICET Nordeste manifiesta su preocupación por una serie de declaraciones realizadas durante los últimos días en medios de comunicación por un candidato a la Presidencia de la Nación, quien adelantó que, en caso de ser electo, promovería la privatización del organismo y cuestionó el trabajo de los científicos argentinos.
Los y las integrantes del Consejo, que reúne a representantes de instituciones científicas de doble dependencia del Chaco, Corrientes, Misiones y Formosa; consideran que se trata de una propuesta sin sustento y que manifiesta un profundo desconocimiento del funcionamiento del sistema científico, tanto en Argentina como en todo el mundo. En ese sentido, destacan la crucial función que cumplen los grupos de investigación que se desempeñan tanto en esta región como en todo el país, aportando a la producción de conocimiento en todas las disciplinas y fortaleciendo el desarrollo de la sociedad.
El CONICET se encuentra entre los organismos de ciencia más productivos del mundo, ocupando el puesto 17 sobre más de mil instituciones que producen conocimiento científico. Entre otros aportes directos a nuestra sociedad se han desarrollado más de mil patentes, cerca de 20 mil servicios tecnológicos de alto nivel y consultorías con el sector privado, incluyendo la creación de más de 50 empresas de base tecnológica. Otros desarrollos más recientes involucran la fabricación de satélites geoestacionarios, baterías de litio, nuevos materiales y desarrollos biotecnológicos de avanzada.
En la región del Nordeste se desempeñan actualmente 855 agentes, que desarrollan actividades en las cuatro grandes áreas del conocimiento: Ciencias Agrarias, de Ingeniería y de Materiales; Ciencias Biológicas y de la Salud; Ciencias Exactas y Naturales y Ciencias Sociales y Humanidades.
Las investigaciones que llevan adelante permiten aportar al desarrollo productivo sustentable de la región y a la prestación de servicios técnicos de alto nivel para empresas. Los trabajos abarcan disciplinas como la biología molecular, el comportamiento y la ecología de sistemas naturales, la creación y mejora de materiales, los desarrollos interdisciplinarios en áreas de las ciencias químicas y bioquímicas, la tecnología y la microbiología de alimentos, entre otros.
En el caso de las Ciencias Sociales, se trabaja atendiendo demandas de la sociedad, tanto desde organismos gubernamentales y no gubernamentales. Las contribuciones más significativas son los estudios referidos a la diversidad cultural y lingüística, la planificación y el ordenamiento territorial, las ciudades y comunidades sostenibles y los estudios de frontera, entre más de 30 líneas de investigación.
El rol del CONICET se visibilizó aún más, en tiempos de pandemia del COVID-19. Los científicos aportaron soluciones concretas entre la producción de sistemas de protección, de detección y tratamientos contra el virus, así como la aplicación de la ciencia de datos al servicio de toda la sociedad. Se contribuyó también con encuestas e información cualitativa referidas a comunidades vulnerables, que permitieron tomar decisiones al Poder Ejecutivo en las distintas fases del aislamiento.
Desde el Consejo Directivo se hace un llamado a la reflexión a todo el sistema político y a la sociedad en su conjunto para defender el importante rol social que cumple el CONICET en el sistema científico argentino y evitar repetir errores del pasado, que causaron la emigración masiva de investigadores e investigadoras.
