VINCULACIÓN TECNOLÓGICA
Monitorean la biodiversidad en paisajes de plantaciones forestales
Se realiza a través de un convenio entre institutos del CONICET y una empresa privada, con el objetivo de lograr el manejo sustentable de los ambientes cultivados.
Investigadores del CONICET en el Instituto de Biología Subtropical (IBS, CONICET - UNAM) y del Centro de Investigación Científica y de Transferencia Tecnológica a la Producción (CICYTTP, CONICET – Pcia ER – UAdER) están trabajando en el desarrollo de pautas para el manejo sustentable en paisajes de plantaciones forestales. Lo hacen en el marco de un convenio suscripto con una empresa, con el objetivo de minimizar el impacto ambiental de la actividad industrial en los ecosistemas de la provincia de Misiones y en la zona del Delta del Paraná.
A través de este convenio, los grupos de investigadores y técnicos llevan adelante monitoreos de fauna y de vegetación en ambientes cultivados y bosques nativos. Con los resultados, elaboran informes para la empresa, que son utilizados como insumo para la planificación de la actividad forestal.
La empresa que solicitó el aporte de científicos para el diseño y la planificación de sus acciones es Arauco Argentina S.A., la mayor compañía forestal de Argentina y una de las más grandes de América Latina. El convenio tiene como responsable técnico al investigador del CONICET en el IBS, Gustavo Zurita y fue gestionado por la Oficina de Vinculación Tecnológica (OVT) del CCT Nordeste.
El plazo de ejecución del convenio es de 14 meses. Durante ese período, los equipos de investigadores y técnicos realizarán monitoreos de biodiversidad en distintos puntos de la zona donde opera la empresa. “A través de cámaras trampa, grabadores remotos y relevamientos en parcelas, estamos muestreando distintos grupos de animales, como mamíferos, aves y anfibios; así como la estructura y diversidad de la vegetación”, explica Diego Varela, profesional de la Carrera de Personal de Apoyo (CPA) y coordinador del Observatorio de Biodiversidad del Bosque Atlántico (OBBA), del CONICET en el IBS nodo Puerto Iguazú.
Los monitoreos se repiten periódicamente en cada uno de los bloques de entre 30 y 50 mil hectáreas de los distritos en los que se divide la zona de operación de la empresa. “La información que obtenemos nos permite identificar la diversidad y abundancia relativa de las especies y compararla entre los bosques nativos protegidos, los corredores ecológicos y las plantaciones de pinos y eucaliptos. Estos datos son fundamentales para la toma de decisiones referidas a la sustentabilidad de la actividad forestal en una de las regiones de mayor biodiversidad del país”, señala Varela.
Los resultados de estos monitoreos son volcados en informes para la empresa, que son utilizados para el diseño de distintas acciones de manejo y conservación.