Usaron luz para medir el espesor del filamento de un foco y ganaron un concurso de ciencia

Con el proyecto “Determinación del espesor de un filamento”, un grupo de alumnos del Colegio General San Martín de la ciudad de Corrientes ganó el primer premio de un concurso organizado por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), que se desarrolló entre abril y octubre de 2015. La propuesta presentada por los estudiantes consistió en utilizar la luz para medir el grosor del filamento de un foco, aplicando los distintos pasos del método científico.

Para contar cómo desarrollaron el trabajo y cuál fue la experiencia colectiva alcanzada a través de “La Luz como instrumento de medición”, dos de los estudiantes y el docente asesor del equipo ganador fueron invitados esta semana al programa Un Buen Día, en el marco de un ciclo de entrevistas que desarrolla CONICET Nordeste en Chaco TV. La participación en el concurso, aseguran, les permitió estimular su interés en el trabajo científico e involucrarse en el proceso de la investigación.

Acompañados del profesor Carlos Mengual, los alumnos Enzo Gauna y Lautaro Delgado contaron cómo nació la idea de usar la luz para medir el filamento de un foco. “Todo empezó un día en el que estábamos probando un banco óptico y vimos la imagen del filamento de un foco que se proyectaba en la pantalla y nos preguntamos si podíamos medir eso”, contó Lautaro. “Primero nos explicaron cómo usar un banco óptico y las lentes, así que empezamos con pruebas sencillas. Después, a medida que íbamos practicando, sumábamos cosas. El profesor nos iba guiando para cumplir con todos los pasos del método científico”, agregó Enzo.

“Un banco óptico es como una regla en la cual se deslizan distintas lentes. Se coloca un foco en uno de los extremos de la superficie y, jugando con la posición de las lentes, se va formando la imagen en la pantalla. Eso fue lo que ellos vieron y les activó la curiosidad de saber si es que podían medir el grosor del filamento”, explicó el docente que guió a los estudiantes. El resultado del trabajo determinó que el espesor era de 42 micrómetros (cada micrómetro equivale a una milésima de milímetro). “Para nosotros no había otra manera de medir eso más que con la luz”, concluyó el profesor.

Para poder cumplir con el reglamento del concurso, el equipo tuvo que seguir diversas pautas. “Se hicieron varias mediciones, se sacaron promedios y se determinó el error porcentual de esas mediciones. También se presentó un informe y se tomaron imágenes para documentar el proceso”, indicó el docente asesor.

Más allá de que sus alumnos hayan ganado el primer premio, el profesor Mengual consideró que lo más valioso de esta experiencia fue incorporar a los jóvenes al desarrollo del conocimiento científico. “En un contexto actual en el que muchas veces la educación aparece relacionada con casos de violencia, bullying o facilismo, que existan iniciativas como esta para acercar a los chicos a la ciencia y motivarlos es algo muy valioso”, reflexionó.

Por haber alcanzado el primer puesto del concurso, el equipo del Colegio San Martín viajará este mes a la provincia de Córdoba, donde participarán de las Olimpiadas Nacionales de Física y expondrán su experiencia en este concurso. También van a visitar los laboratorios de la Facultad de Matemática, Astronomía y Física de la Universidad Nacional de Córdoba y otros observatorios.

“Estamos muy contentos y no nos esperábamos ganar porque participaron muchos equipos de toda la provincia”, reconoció Lautaro. “Nos permitió ver y experimentar de lleno cómo es trabajar en un laboratorio, manejar instrumentos de precisión y realizar informes. Particularmente, me interesó mucho porque tengo pensado seguir la carrera de ingeniería y esta fue una primera aproximación”, agregó Enzo.

El concurso “La luz como instrumento de medición” fue una iniciativa que nació en el Instituto de Modelado e Innovación Tecnológia (IMIT, CONICET – UNNE) y fue una prueba piloto para el desarrollo de actividades de promoción de la ciencia en jóvenes en la región. Para próximas ediciones, se tiene previsto extender la convocatoria a colegios secundarios de otras provincias del Nordeste.

Cabe señalar que el concurso se desarrolló con financiamiento del Programa de Promoción de Vocaciones Científicas (VocAr) del CONICET y cuenta con el auspicio del Programa Nacional de Popularización de la Ciencia y la Tecnología del MinCyT. También se recibieron aportes del Gobierno de la Provincia de Corrientes.